Sonriente

El sol se abría paso entre la niebla otoñal. El frío calaba los huesos.

-Dicen que tenía un pasado complicado. Son cosas que se escuchan, uno no les da verdadero crédito hasta que pasan estas cosas, ¿sabe?

-A mi me dijeron todo lo contrario, que siempre tuvo la vida solucionada. ¿De donde se cree que sacaba para pagar este pisito, en esta zona, sino trabajaba?...

-Cuando uno no conoce la vida del trabajo llega un momento en que te pega un sopapo la realidad y asi quedas..Le paso a un primo mio, pretendió vivir de vago y terminó así como terminó.

-Tenía entendido que trabajaba de artista, o algo asi. Que la verdad hoy en día es lo mismo que ser un vago, ¿no? por lo menos no es un trabajo de lo más decente..

-Me dijo el portero que le dijo el vecino, que su hermano lo vino a visitar ayer por la noche. Tal vez después salga en los periodicos...

-Tal vez no era su hermano..¿Lo vieron alguna vez? No eran parecidos, definitivamente no.

-Pueden ser hemanos de diferente padre...No simempre hay que pensar mal.

- A mi me dijo el diarero de la otra calle que tenía gustos raros...diferentes.

- Nooo, mi departamento da frente al suyo..y vi entrar cada minita, que ni te cuento.

-Para mi que esto va a traer cola...Este barrio tiene una reputación que no va con este tipo de personajes.

- Un tipo con tantos interrogantes en su vida...algo esconde definitivamente.

Él salió sonriendo, tan frío como el amanecer, sin importarle lo que el mundo diga. No le importó cuando sintió la punta de la pistola en la sien, ni tampoco ahora.

La tranquilidad del hogar

No hay nada más placentero en el mundo que la tranquilidad del hogar. Regresar de un largo viaje de negocios y saber que todo esta igual como lo hemos dejado, es lo único que un buen señor, como yo, podría desear. Abrir las puertas del hogar y encontrar a la esposa bien vestida y lista para salir a cenar, a la niña crecida y hermosa en verdad. Ya lo decía mi augusto padre, un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar.
Ya vuelve, ya vuelve dicen sin parar. ¿Será ese hombre el que entra y sonrie sin parar? Dicen que es "papá" pero no se bien quién es, tiene bigote y mirada cansada, me dan ganas de llorar. Nany agarrame fuerte, mami no me sueltes o un berrinche escucharás.
Ya esta aquí, donde debe estar. Con su fiel esposa y su bella hija que lo reciben al llegar. Me vestí como si fuera a un funeral. Regresa y mi vida social no tiene otro rumbo más que terminar. ¿En dónde quedarán los cafés de media tarde con Oscar y las reuniones de bordar? Una mujer en su casa y a la espera de su esposo debe estar, eso es lo que él no se cansa de recitar.
El patrón se deja ver cansado al entrar. Como si su esposa no supiera lo que hace en realidad, en los viajes de negocios que dice tomar. Pero a mi no me va a engañar, yo lo conozco sin antifaz, cuando sus manos vivarachas me quieren tocar. Lo que debe ser lejos de la mirada de su esposa, si así se ha de comportar en el sagrado recinto de su hogar. No hay nada más placentero en el mundo que la tranquilidad del hogar cuando él no ha de estar.

Nene grande

No se come, no se come, no se come... es para los animalitos dijo mamá. ¿Porque será que Lili corre tan rápido que no la puedo alcanzar? Mamá una vez me dijo que algún día voy a crecer tanto que voy a poder correr a todos, y también a Lili.
Cuantas cosas lindas hay acá, mamá nos trajo de paseo a Lili y a mí. Para que los chicos conozcan, le dijo a papá. A papá no le gusta venir pero le preguntó a mamá a donde íbamos, le gusta saber. Pero no le gusta venir.
¡Hay tantos animales! ¿Será que viven siempre así? En sus jaulitas. Mamá me dijo que todos están en jaulas que no se pueden escapar. Lo dijo porque Lili se asustó, yo no porque soy el hombrecito de la casa. Así me dijo mi abuelo. Hace mucho que el abuelo no viene, será que está lejos. Como esos leones, una señora que habla mucho nos dijo que viven en África y mamá me dijo que eso es lejos. Como el abuelo, que está lejos.
Aunque crezca mucho nunca voy a crecer tanto como un elefante, es el más grande de todos. Lili estaba asustada. Yo no. Me puse cerquita para mirarlo bien. Creo que se dio cuenta que lo quería mirar porque también se acercó. Mucho no, porque hay un pozo con una reja, para que no se escape me dijo mamá.
Son muy arrugados como si fueran viejitos, viejitos. Hasta el más chiquito es así. Como el abuelo. Lo extraño a veces al abuelo, más cuando me decía que era el hombrecito de la casa y me regalaba caramelos. ¿Mamá cuando va a venir el abuelo? Mira el elefante, me dijo mamá.
Creo que se aburrió de mi o se dio cuenta que Lili le tenia miedo y prefirió irse. O tal vez se dio cuenta que yo estaba pensando en el abuelo. Que arrugado que es y de un color gris feo. Cuando sea grande me voy a subir a uno. Lo vi en una película una vez, viajaban por la selva en elefante.
Se fue. No se si le caí bien, seguro se asusto de Lili que empezó a llorar. Es tan llorona Lili, tiene miedo de todo. No como yo. ¿Porque será que les gusta tanto el agua? Parece como si se refrescaran con las trompas tarándose agua. Tanta agua. No la toman como yo, que tome una gaseosa grande recién. Pero la comida para los animalitos no se come. Me tome toda la gaseosa. Mamá, me dieron ganas de hacer pis. Los nenes grandes también van al baño.